Tuesday, September 21, 2021

Loriot y su sofá verde son inseparables

(tae/spot) Loriot murió el 22 de agosto de 2011. Diez años después de su muerte, sus bocetos y caricaturas siguen siendo recordados. El sofá verde será para siempre su legado. Loriot (1923-2011), el maestro del buen entretenimiento, murió hace diez años -el 22 de agosto de 2011- en Ammerland, a orillas del lago Starnberg. El conocido humorista tenía 87 años. A través de sus bocetos y caricaturas, Loriot sigue vivo hasta hoy. Sus hombres con nariz de bulbo se hicieron especialmente famosos. Sus obras incluyen libros, series y películas, y Loriot también puso en escena óperas y obras de teatro. Frases como "¡Antes había más oropel!", "¡Un piano, un piano!" y "Por favor, no digas nada ahora..." son citadas por los fans de Loriot hasta el día de hoy. Loriot siempre fue un gran observador de las personas; le gustaban especialmente los "trastornos de la comunicación", como él mismo dijo una vez. Estas personas le interesan "sobre todo". "Todo lo que me hace gracia surge de una comunicación rota, de hablar más allá del otro". Sus breves bocetos y caricaturas, que siempre comentaba desde un icónico sofá verde, también prosperan en este sentido. "El huevo del desayuno" Este sketch se llama a veces simplemente "El huevo" y es uno de los más populares de Loriot. El corto de dibujos animados trata de la vida cotidiana de un matrimonio. Los dos están sentados en la mesa del desayuno. El marido declara sombríamente: "¡Berta, el huevo está duro!", a lo que su mujer responde: "Lo he oído". A continuación, se produce un diálogo en el que ambos -como sucede a menudo en las películas de Loriot- se pasan por el forro. Hermann reprocha a su mujer que no haya sido capaz de hervir el huevo durante cuatro minutos y medio. "Puedo sentirlo cuando el huevo está blando", explica Berta. Al final, Hermann dice: "La mataré. Mañana la mataré". "Herren im Bad" "Herren im Bad" es también uno de los sketches más conocidos de Loriot. Los protagonistas son el Sr. Müller-Lüdenscheidt, el Dr. Klöbner y un pato chillón. Los dos caballeros están sentados juntos en la bañera de una habitación de hotel; el Dr. Klöbner se ha equivocado con el número de la habitación. Sin embargo, ninguno de los dos quiere salir de la bañera, así que se ponen de acuerdo sobre la temperatura del agua. El Dr. Klöbner quiere bañarse con su pato chillón, a lo que el Sr. Müller-Lüdenscheidt se niega con vehemencia. El diálogo continúa y termina en un concurso de buceo. Al final del sketch, un tercer hombre aparece en la puerta -mientras los otros dos se sumergen- y pregunta: "¿Esta es la habitación 107?". "El piano de la madre" Este sketch también se conoce como "Home TV". A diferencia de los dos dibujos animados anteriores, ésta es una película de acción real. La exclamación "¡un piano, un piano!" se convirtió en una palabra alada gracias al boceto. La familia Panislowski recibe un piano de la Madre Berta en Massachusetts. El Sr. Panislowski (Loriot) quiere capturar este momento junto a toda la familia con una cámara de cine: El hijo Thomas (Rudolf Kowalski) sigue las instrucciones para hacerlo. En repetidas ocasiones le preguntan "¿Está la cinta en marcha?", a lo que él responde con un cada vez más exasperado "¡Sí, lo está! La esposa del Sr. Panislowski, llamada "Muttilein" (Ingeborg Heydorn), así como su nieto, su nuera y los encargados de la mudanza, también son instruidos precisamente por el Sr. Panislowski. Una y otra vez algo sale mal durante el transporte del piano, de modo que la película tiene que reiniciarse una y otra vez. "El Fideo" Un hombre (Loriot) y una mujer llamada Hildegard (Evelyn Hamann) se encuentran en una cena romántica en un restaurante italiano. Ambos consumen un plato de pasta. Cuando el hombre se limpia la boca con una servilleta, un fideo alargado se le queda pegado en el labio inferior. Entonces le confiesa su amor, pero Hildegard se distrae con el fideo. Durante su confesión de amor, se agarra repetidamente la cara de tal manera que el fideo se pega en un punto diferente de la cara cada vez. Al principio, Hildegard intenta interrumpir su torrente de palabras, pero luego se limita a observar sin palabras. "Navidad en Hoppenstedt" Como muchos de los sketches de Loriot, éste procede de la serie de televisión del mismo nombre. "Navidad en Hoppenstedts" dura 25 minutos y consta de diferentes escenas, desde los preparativos para la Navidad hasta la compra de regalos y las propias celebraciones en familia. El abuelo Hoppenstedt (Loriot) compra primero a su nieto Dicki (Katja Bogdanski) un regalo de Navidad, el kit de construcción de maquetas "Wir bauen uns ein Atomkraftwerk".